El negocio de bienes raíces es una de las inversiones que generalmente no causan pérdidas, puesto que bien administradas siempre ofrecerán ganancias rentables . Sin embargo, arrendar un inmueble se puede convertir en un proceso tedioso y difícil que ocasione tener la propiedad desocupada por un buen tiempo.
Uno de los principales obstáculos para alquilar y empezar a recibir una renta mensual, es el codeudor. Los usuarios en la actualidad están buscando arriendos directos sin fiador que faciliten el proceso de alquiler de una vivienda, sin tener que pedir ese incómodo favor a un familiar o amigo.
Al realizar arriendos directos sin fiador, el propietario puede llegar a sufrir situaciones incómodas que se presentan con frecuencia en el sector inmobiliario, como lo son: el incumplimiento del pago del arriendo por parte del inquilino o el uso inadecuado e ilegal de la residencia.
Para que esto no ocurra, lo ideal es hacer una selección detallada y profunda sobre las personas que ocuparán el inmueble. Además, asegurarse de que cumplan con las garantías que permitan sacarle el mayor provecho al inmueble y evitar problemas.
Es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones al momento de arrendar su propiedad, con el fin de vivir una buena experiencia, tener un buen inquilino y conseguir la rentabilidad esperada:
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Para conocer el valor justo a cobrar por el canon de arrendamiento , se debe realizar una evaluó, en el que se evalúen las características del inmueble como: el área, años de construcción, si se encuentra en conjunto cerrado, si cuenta con ascensor o parqueaderos, entre otras. Así mismo, también es importante investigar las propiedades en arriendo cercanas, para establecer un precio competitivo.
Ofrecer un espacio idóneo para vivir y en buen estado, puesto que si la fachada de la edificación está descuidada podría bajar el precio del arriendo. Por tal motivo, fijarse que todo esté funcionando bien y no exista ningún daño importante.
Es de vital importancia realizar un estudio cuidadoso y profundo sobre el futuro arrendatario. Verificar que este tenga los ingresos económicos que le permitan cumplir con el pago, por lo cual lo más recomendable es arrendar con el soporte de una aseguradora , dado que esta entidad se encarga de garantizar que no haya incumplimientos con los pagos.
Definir si el inmueble se va a arrendar de manera tradicional (anuncio en el edificio o ventana), por medio de una inmobiliaria o por plataformas digitales. Si se elige el canal adecuado, se logrará arrendar la vivienda a un buen precio y en un corto periodo de tiempo.
Al tomar una vivienda en arriendo, la inmobiliaria o la aseguradora hacen un estudio de arrendamiento para los futuros inquilinos, en el cual se analiza la capacidad económica de los interesados en arrendar la propiedad y se determina si pueden cumplir con el canon establecido.
El resultado de dicho estudio es una garantía para el momento de firmar el contrato, puesto que se minimizan los riesgos de incumplimiento con los pagos.
El estudio de arrendamiento arroja un valor casi exacto de la capacidad de pago del futuro inquilino, ya que al menos se deben tener ingresos superiores por el doble del valor del canon mensual.
Normalmente se exigen entre uno o dos codeudores para respaldar el contrato. Sin embargo, existen estudios para arriendos directos sin fiador , los cuales son un poco más exigentes con las capacidades de pago del arrendatario.
Los principales documentos que se exigen en un estudio de arrendamiento son:
Es importante aclarar que según el contrato y el valor del canon de arrendamiento se establece qué papeles se le piden al futuro inquilino. De acuerdo a la actividad comercial de la persona se le exigen algunos o todos los papeles que mencionamos anteriormente.
El pago de arrendamientos fue uno de los sectores en el país en los que mayor se sintió los efectos generados por la pandemia del Covid-19. Sin embargo, las pólizas de seguro de arrendamientos surgieron como una solución para resolver y respaldar los incumpliéndoos de algunos inquilinos.
Cuando hablamos de seguros de arrendamiento nos referimos a una póliza que respalda y le paga al propietario el arriendo, los servicios, la administración y los posibles daños ocasionados al inmueble, en caso de que exista incumplimientos con alguna de estas obligaciones.
Este tipo de seguros tienen como principal función hacer el estudio de capacidad de pago del inquilino y de aprobarlo o desaprobarlo, según la historia crediticia, los ingresos y las referencias comerciales o bancarias.
La póliza de arrendamiento normalmente cubre el pago de hasta 36 meses de arriendo, en caso de que el arrendatario incumpla y los costos jurídicos si hay necesidad de incurrir en un proceso legal. Así mismo, algunas aseguradoras ofrecen cubrimientos adicionales como el pago de administración, de los servicios públicos e incluso asistencia domiciliaria para daños ocasionados en el inmueble.
El valor de las pólizas varía entre 50% y 60% del valor total del canon de arrendamiento. Existe la posibilidad de realizar el pago de contado o pagarlo de forma mensual, en el cual hay un descuento de un porcentaje entre el 2% al 6% del arriendo.
Este tipo de seguros pueden ser adquiridos de las siguientes maneras:
La persona que quiera tomar en arriendo un inmueble asegurado deben cumplir con la documentación y condiciones estipuladas por la aseguradora. La vigencia de esta póliza de seguro tiene duración de un año y se renueva cada vez que se renueva el contrato.
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Al momento de alquilar una propiedad, uno de los principales impedimentos es conseguir una o dos personas que sirvan como codeudores para respaldar el contrato del arrendamiento. Sin embargo, existen varias alternativas que se ofrecen en el mercado inmobiliario, donde no es obligatorio contar con un fiador para poder arrendar una vivienda.
A continuación, te contamos las alternativas que existen si se desea arrendar directamente sin fiador:
Finalmente, hay que tener en cuenta que el mercado ofrece diversas opciones para proteger el patrimonio y lo importante es minimizar los riesgos al momento de arrendar la propiedad. Por lo cual, es indispensable acudir a una inmobiliaria con experiencia y reconocimiento, que brinde un excelente servicio y cuenten con el respaldo de una póliza colectiva para contratos de arrendamiento.
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